viernes, 23 de abril de 2010

Sant Jordiev

Hoy me ha pasado una cosa muy rara. Me he despertado y tenía una resaca acojonante, esto no es lo raro. Lo extraño es que luego he pensado... "pero si yo ayer no bebí". Y de repente se me ha ido la resaca. Ahora tengo que probar a ver si este método funciona también con la sugestión. Es decir, habiéndote bebido hasta el agua de los floreros, pero convenciéndote de que no.

Que el día de Sant Jordi sea un día festivo y a la vez laborable, a mi me resulta un poco paradójico, pero yo no soy de aquí. Si es verdad que las Ramblas se transforman un poco, aunque no tanto. Los mimos dejan su hueco a los tenderetes de los partidos políticos, y los viandantes adquieren libros de Crepúsculo en vez de comprar La Razón o El Mundo.

Estaba esperando a unas amigas cuando me he despistado y terminado parando en un puestecillo de publicaciones así izquierdosas. Hace unos años me leí algunos de Lenin y Marx (por obligación) y me parecieron soporíferos, pero tienen títulos cojonudos, así que me he entretenido echándoles un ojo. "La libertad en Venezuela", "La Cuba de todos"... En ese momento, uno de los dependientes, de pelo rizado, barba, pantalón de cuadros y 17 pendientes me ha empezado a hablar.

-Hombre compañero. ¿En qué te puedo ayudar?- Me ha dicho en un tono bastante amigable, como si me conociera de algo.
-Umm... solo estoy echando un ojo. Los libros hoy te los tienen que regalar, no voy a ser yo el que le quite la magia a esto del Sant Jordi.- He contestado intentando irme por la tangente.
-Mira... tengo aquí una edición extendida del "Estado y la Revolución" de Lenin que es acojonante.- La verdad es que tenia buena pinta, así forrado en "cuero/plastiquete" y letras doradas. Muy poco comunista el aspecto, por cierto.
-Uff... ya lo he leído y no me va mucho Lenin.- Error, no sabía por dónde cortar la conversación y he abierto la caja de Pandora.
-Ahhhmm, ya veo por dónde vas. Éste, "Terrorismo y Comunismo" de Trotsky, te va a flipar. A mi me encanta y no soy nada Trotskista. Tiene unos giros de guión cojonudos.- Ya iba a venderme la moto. Trotsky o te gusta o no. Como pasa con el regaliz o las aceitunas.

No sabía qué decir (a mi Trotsky no me disgusta, pero no iba a comprarme un libro suyo), he puesto una mueca y el dependiente ha seguido a la carga.

-Vale... veo que tampoco te ha molado mucho. ¡Bah! voy a hacer un ultimo intento, pero por favor no le digas a nadie que tenemos este libro, que se nos cae el pelo. Solo te digo que es mi favorito, una maravilla. Lo ha sacado de una bolsa de papel marrón y me lo ha enseñado así de forma clandestina...

- Mira, creo que me voy a ir. Se me ha puesto mal cuerpo. Me ha debido sentar mal el helado de leche merengada que me acabo de tomar.- ¿Y el próximo de quien era? ¿Lucia Etxebarría?

4 comentarios:

Laura dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Laura dijo...

Jajajaja, en esa zona de las Ramblas también he visto yo a unos independentistas con el lema "Catalonia is not Spain", y más abajo, a la caseta de UPyD, con la bandera de España...

Por cierto, Lucía Etxeberría estaba firmando libros un poco más arriba, en la fnac Triangle. No te quedaba lejos ;)

Pare Bukkàkez dijo...

Joer, me ha encantao esa clase yéndote por la tangente. Bravo Jan.

Hoy es día de terrorismo editorial, hay que ir con cuidado.

Dulci dijo...

Muy bueno, en serio, buenísimo, sigue.............